Manuel Rodríguez Romero
PERIODISTA
Un personaje histórico, íntimamente ligado a la independencia de Trujillo y por ende del Perú, nacido en las ubérrimas tierras del ande liberteño y que tuvo una decisiva participación en el grito libertario del 29 de diciembre de 1820 es Luis José de Orbegoso y Moncada.
Luis José de Orbegoso nació el 25 de agosto de 1795 en la ex hacienda Chuquizongo, situada en el actual distrito de Usquil, Otuzco, La Libertad. Fue hijo del limeño Justo Pastor de Orbegoso Isasi, alcalde ordinario de Trujillo, y de la trujillana Francisca Moncada Galindo, IV Condesa de Olmos. Murió en Trujillo el 5 de febrero de 1847.
En Chuquisongo aún se observa la vetusta casa hacienda donde nació el prócer, cuyo frontis de arcos al estilo colonial, está en ruinas, debido a la indiferencia de las autoridades para perennizar este lugar histórico no sólo para Trujillo sino para el Perú, teniendo en cuenta que llegó a ser Presidente Provisorio en 1833, pero por sobre todo por su desprendimiento y nobleza a favor de la emancipación.
Después de aprender las primeras letras, su familia retornó a Trujillo en donde estudió latín en el seminario de San Carlos y San Marcelo, bajo la enseñanza de don José Modesto de la Vega (quien después sería su gran amigo y apoderado). En 1807 pasó al Real Convictorio de San Carlos en Lima, donde cursó Filosofía, Matemáticas y Física.
En 1812, concluido su bachillerato en Artes, retornó a Trujillo por una grave enfermedad de su padre. Como no sentía inclinación por la carrera eclesiástica, ni por las letras, asumió la administración del patrimonio familiar y de la producción agropecuaria de su hacienda Chuquizongo. Su padre falleció en 1814.
En 1815 se incorporó al regimiento de milicias de Trujillo como cadete de caballería, con el cargo de portaestandarte del primer escuadrón. Ascendido a alférez de la compañía de carabineros, teniente de la VII compañía del regimiento de milicias provinciales disciplinadas de caballería de Trujillo (1817) y, luego, en el mismo regimiento, ayudante mayor (1819) y capitán (1820).
En 1816 contrajo matrimonio con María Josefa Martínez de Pinillos Cacho, hija de don Juan José Martínez de Pinillos y Larios y de doña Josefa Cacho y Lavalle. Cuatro meses después, los esposos se trasladaron a su hacienda Chuquizongo en donde nació su primogénito, regresando a Trujillo dos años más tarde.
Luis José de Orbegoso y Moncada secundó en Trujillo la proclamación de la independencia realizada por Marques de Torre Tagle. Fue ascendido sucesivamente a sargento mayor (1821), teniente coronel (1822) y coronel graduado (1823). Al ser comisionado para formar un escuadrón, lo dotó de armas y víveres de su propio peculio. Respaldó al presidente José de la Riva Agüero, cuando éste se refugió en Trujillo tras ser destituido por el Congreso, en vísperas del arribo del Libertador Simón Bolívar.
Riva Agüero lo comisionó a Ilo (puerto del sur del Perú) a fin de fortalecer su causa apoyando al ejército peruano que había emprendido la Segunda Campaña de Intermedios contra los españoles que permanecían fuertes en la sierra sur, pero Orbegoso encontró dicho ejército ya derrotado y disperso.
Al regresar a Trujillo, se encontró que Riva Agüero había sido apresado por sus propios subordinados, a fin de centralizar el mando del país en manos de Bolívar. Descontento por este hecho, solicitó un año de licencia. No obstante, ofreció sus haciendas (ricas sobre todo en ganado) y su fortuna para atender a las necesidades del ejército patriota, y sólo pidió que al terminar la guerra se le devolviese lo que de ellas quedase, a fin de intentar su rehabilitación.
Esta contribución a la causa patriota fue decisiva, junto con la de otros hacendados y propietarios del norte del Perú, lo cual no suele ser reconocido por los historiadores, en especial los venezolanos, que atribuyen la victoria patriota exclusivamente al talento militar de Bolívar.
Desempeñó el cargo de Prefecto del departamento de La Libertad (2 de septiembre de 1824). En tal función se encargó de acopiar recursos que contribuyeron eficazmente a la feliz culminación de la campaña emancipadora.
En su condición de diputado por Trujillo al frustrado Congreso de 1826, presidió la comisión enviada ante Bolívar para solicitarle que permaneciese en el país. El 28 de abril de 1826 fue ascendido a General de Brigada y reasumió la prefectura de Trujillo. También fue elegido diputado por Huamachuco y ostentando ya el grado de general de división, se incorporó a la Convención Nacional instalada en Lima (12 de septiembre de 1833). La Convención Nacional se arrogó la potestad de elegir a un Presidente provisorio. Los conservadores o gobiernistas apoyaron la candidatura del general Pedro Pablo Bermúdez y los liberales la de Orbegoso, quien era apreciado por su ánimo caballeroso. El ganador fue Orbegoso (20 de diciembre de 1833).
Al día siguiente, Orbegoso concurrió ante la Convención Nacional, prestó el juramento prescrito por la ley y asumió el mando.