De nunca acabar. Otra vez serán analizadas las aguas del río Moche, para determinar el grado de contaminación producto de los relaves mineros. Fue uno de los acuerdos al que arribaron las autoridades en la Mesa de Trabajo realizada el miércoles último en el distrito de Poroto, en la provincia de Trujillo.
Esta reunión de diferentes instituciones fue impulsada por el congresista Lenin Bazán Villanueva, presidente de la Comisión de Pueblos Andinos, Amazónicos y Afroperuanos, Ambiente y Ecología del Legislativo; quien buscó establecer acuerdos a nivel multisectorial e intergubernamental con la participación de la sociedad civil a favor de la remediación, recuperación integral y descontaminación del río Moche.
Otra de las importantes acciones a realizar es la toma de muestras de sangre a los pobladores de las zonas aledañas al río para detectar la contaminación por metales pesados u otras sustancias tóxicas, lo cual estará a cargo de la Gerencia Regional de Salud (GERESA).
Las actividades de instalación de la mesa se iniciaron con una visita técnica a la bocatoma del río Moche a fin de inspeccionar los daños ocasionados por la irresponsabilidad minera, que pone en riesgo la vida y la salud de los pobladores de la cuenca y los cultivos de los pequeños agricultores.
La contaminación del río Moche es un problema que se arrastra más de 80 años, desde que se explotaba las minerales en la sierra de La Libertad en las alturas donde nace el afluente del Pacífico. Muchas denuncias se han hecho y muchos análisis también se han realizado, pero el problema no hay cuando sea solucionado.
