LA HERMELINDA Y CORONAVIRUS / Una “bomba de tiempo” a punto de explotar

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LA HERMELINDA Y CORONAVIRUS / Una “bomba de tiempo” a punto de explotar

 

Escribe:
Manuel Rodríguez R.

PERIODISTA

El mercado mayorista La Hermelinda, que alberga a cerca de cinco mil comerciantes, y que diariamente abastece de alimentos a miles de familias trujillanas, ha sido y es una “bomba de tiempo” que puede explotar en cualquier momento, más ahora que nos acecha la pandemia del coronavirus.

Por características propias de un mercado mayorista, donde campea el desorden, la antihigiene, delincuencia, prostitución y la informalidad, debió, con la intervención de las autoridades, desde hace muchos años, brindar un servicio garantizado en bien de la salud de la población.

Si bien es cierto que el mercado La Hermelinda es un establecimiento privado, cuyo terreno fue comprado en los años 90 por los comerciantes, que ahora son sus socios, esto no es obstáculo para merecer la intervención de las autoridades municipales y regionales, que son quiénes imponen las reglas de juego.

Sin embargo, los gobiernos locales que se sucedieron, gestión tras gestión, nada o casi nada hicieron para poner a la orden al mercado La Hermelinda y convertirlo en el mejor mercado Mayorista del Perú, porque sí pudo serlo, y puede serlo aún.

Con los años el mercado La Hermelinda funcionó a la deriva, aun  cuando sus socios (o comerciantes, dueños de los puestos), elegían cada cierto periodo a sus dirigentes, pero estos en vez de optimizar y modernizar sus instalaciones y servicios se enfrentaron para usufructuar del poder.

Los dirigentes liderados por Santiago Quipuscoa, que lucharon desde el inicio para instalarse en el fundo de la familia Quesada, a la cual compraron el predio, luego de la erradicación de la Parada de Palermo en el jirón Olmedo, cerca al mercado zonal Mayorista, por la entonces alcaldesa Miriam Pilco, con el tiempo fueron desplazados.

Hoy La Hermelinda, convertido en despensa no solo de los trujillanos y en el  mercado mayorista más grande del norte de Perú, con la pandemia agudizó sus problemas porque las autoridades no supieron o no quisieron abordarlos a tiempo. En tiempos de la pandemia es un gran peligro para la salud de miles de personas.

Es por eso que esta mañana el gobernador regional de La Libertad, Manuel Llempén, y el alcalde provincial de Trujillo, Daniel Marcelo, visitaron el mercado La Hermelinda, acompañados de los jefes del Ejército y de la Policía Nacional, a fin de adoptar las medidas pertinentes para evitar la propagación masiva del coronavirus.

Mañana se sabrá las medidas que adoptarán las autoridades y que deberán acatar comerciantes y consumidores. Hay que tener en cuenta que La Hermelinda es la despensa no solo de Trujillo sino de los distritos. Las medidas deben ser bien estudiadas y atinadas para beneficio de todos y evitar que sea campo fértil para la pandemia y cobre mas victimas que lamentar.

Manuel Rodríguez



El Nuevo Lider

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