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Hecho ocurrió en la mañana del lunes en a UPIS “Manuel Arévalo III, La Esperanza, frente al mercado Acomimar.
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Injusto policía de la comisaría de Wichansao se negó a recibir manifestaciones de personas agredidas y sólo recibió denuncia adelantada de agresora.
LA ESPERANZA, TRUJILLO/Una joven mujer de la tercera etapa de la UPIS Manuel Arévalo (distrito La Esperanza) causó violentos destrozos, con un grueso palo, en un pequeño puesto de venta de desayunos, ubicado frente al mercado Acomimar, a media cuadra de la IE Fe y Alegría.
La iracunda mujer, Ingrid Urrelo Medina, que llegó a bordo de una motocar, bajó con un grueso palo de 2 metros, dirigiéndose directamente a romper las lunas de la ventana de la humilde vivienda de la familia Vásquez-Rodríguez, luego destrozó una vitrina y vacío los baldes de quinua.
Luego de romper las ventanas, golpeó salvajemente a Andrés Vásquez, dueño de la vivienda, que salió en defensa de su agredida hija Diana Vásquez y su menor nieta. Amenazaba con golpear la cabeza con el palo. El padre de las agredidas ha tenido que ir al médico legista por las heridas causadas.
Trascendió que el motivo de la brutal agresión a la familia Vásquez-Rodríguez se debería a que le estaban cobrando 300 soles por deuda de desayunos. No le habría gustado que le cobraran la deuda.
De no haber sido por una persona, que transitaba por la calle, que quitó el palo a la violenta mujer, ésta hubiera causado mayores daños materiales y personales. Estaba incontrolable.
En la comisaría de Winchansao, al llegar, los agraviados se dieron con la ingrata sorpresa que la agresora ya había sentado la denuncia contra los agraviados, mintiendo a la Policía, sin saber que hay una video filmado desde el mercado Acomimar. En el vídeo se ve que la agresora Ingrid Urrelo emprendió, sin motivo alguno, a golpear la vitrina y ventana de la vivienda y derramar los baldes de desayuno.
POLICÍA NO QUISO RECIBIR DENUNCIA
Lo condenable es que el efectivo de la Comisaría de Wichansao, técnico de apellido León, no quiso recibir la manifestación a los agraviados, a quienes incluso los trató de amedrentar para que no insistan con registrar sus manifestaciones.
El técnico León será quejado a Inspectoría de la Policía Nacional, pues de esto ya tiene conocimiento el general PNP José Zavala, que habría ordenado investigar el accionar del técnico León.
Mientras tanto, los vecinos se han solidarizado con la familia Vásquez-Rodríguez, que es muy laboriosa y humilde, que se dedica a vender desayunos por las mañanas para su sustento diario. Ellos reclaman justicia y que la mujer agresora pague los daños.
