Por:
Manuel Rodríguez Romero
Periodista
Ramón Castilla visitó Otuzco el mes de abril de 1824. Esta es la historia. El libertador Simón Bolívar llegó el 13 de abril a Otuzco, procedente de Trujillo y de paso a Huamachuco. Para amanecer el 14 se alojó y durmió en una casa de la calle Grau 784, esquina con calle Trujillo, a dos cuadras de la Plaza de Armas.
El escritor trujillano Iván La Riva, precisamente en uno de sus libros, hace referencia a la estadía del libertador Bolívar en Otuzco y su encuentro con Ramón Castilla.
Estando Bolívar por partir a Huamachuco, llegó un escuadrón a esta ciudad, al mando de Castilla, aun con el grado de sargento mayor. Este escuadrón realista estaba compuesto por peruanos, con instrucciones precisas a ponerse a las órdenes del libertador.
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Publicado hoy en diario La Industria.
Bolívar ordena a Castilla que entregue su escuadrón a un jefe colombiano. Castilla, sorprendido por la actitud del libertador venezolano, le responde lo siguiente: “Yo no he venido a entregar mi escuadrón sino a ponerlo a órdenes de vuecencia”.
Incómodo por la respuesta, Bolívar dispuso que se envíe a Castilla a prisión. Los oficiales colombianos, al ejecutar la orden, se excedieron en el rigor, a tal punto que le pusieron grilletes en las manos.
La Riva señala que Bolívar, enterado del castigo desproporcionado y vejatorio impuesto a Castilla, ordenó que se le pusiera en libertad y pasara a combatir a órdenes del general La Mar, lo que hizo posible su destacada participación en la batalla de Ayacucho.
Años más tarde, Ramón Castilla investido de presidente del Perú promulga la ley de creación de provincia de Otuzco, el 25 de abril de 1861. De esta forma fue desmembrada de la provincia de Huamachuco, hoy Sánchez Carrión.
En agradecimiento a Castilla por haber creado la nueva provincia, los otuzcanos formaron el grupo de folclor “Los Negritos de la Virgen”, que, desde entonces, acompañan en todas las procesiones a la milagrosa imagen de la Inmaculada Virgen de la Puerta. Como se dijo, también pusieron su nombre a un tradicional barrio ubicado a la salida de Otuzco a Usquil, distrito de donde es oriundo el prócer de la Independencia Luis José de Orbegoso y Moncada, y de donde fueron los 240 jinetes que conformaron el glorioso regimiento Húsares de Junín.
Al mariscal Ramón Castilla se le recuerda, gracias a la enseñanza de nuestros profesores de Historia del Perú, en la secundaria, por haber liberado a los esclavos y por haber abolido los tributos a los indígenas, cuando ejerció la Presidencia de la República, además de otras obras emblemáticas en beneficio de la patria. Es el mejor presidente que ha tenido el Perú en toda su historia, que impulsó la educación, el transporte ferroviario y muchas obras más. (Del libro por editar: LA SUBLEVACIÓN DE JOSÉ SALINAS Y LA INDEPENDENCIA DE OTUZCO)
